Me llamó la atención,que ayer en el acto de la plaza de Armas uno de los jugadores (Diego Piñeiro) dijo "Cascarilla el que no bote" y todo el mund botó,pero,sorpresa,ninguno de los dos periodicos (La voz ni el Ferrol Diario) se hicieron eco de la frase,que pasa que no era politicamente correcto,tuvo que pasar previamente la censura,¿ustedes creen que si la celebraciòn fuera al reves y en Maria Pita en su momento Fran dijera "Villapodre el que no bote" al dia siguiente no estaba en los dos diarios,pues anda que en una celebraciòn,ya no me acuerdo cual no cargaròn contra Vigo y el Celta.
Por cierto,otra emisora (Onda Cero)en un programa deportivo que se emite a las 3 de la tarde y conduce un tal Alberto Diaz Barros,nos està machacando todos los dias con Lotina,Marcelino,el ex del Recre,Riki,Xisco....asi todos los dias,y al dia sguiente otra vez la entrevista con Lotina......del Racing al las 15,55 (el programa acaba a las 16.h) algùn dia pone una pequeña entrevista y del acto de ayer en la Plaza de Armas....que todos fuimos muy felices. (esto ultimo es una ironía mia).
Los espero,entre mis amigos saben que yo hace muchos años,reviindico que llegarà algun dia que el Coruña y nuestro Racing voveran a disputar alguna vez partidos oficiales de liga.
¡¡¡¡¡ CASCARILLA EL QUE NO BOTE !!!!!!!
Los agoreros de la genética deportiva especulan sobre un futuro terrible donde, a través de nuestros genes, sabrán todo sobre nosotros; y si tienes posibles enfermedades deportivas en los genes te discriminarán. Pero eso ya pasa con estos gurus y sus acolitos. Pero en este caso la discriminación se basa en un conocimiento más que dudoso y medido con unos simples tests. Test que por cierto son secretos, no sea que aprendamos a pasarlos.
No sé por qué se les contrata a ellos, o lo que es peor a las empresas que ellos crean, pues es un dinero malgastado. Si yo fuera empresario español (igual a ignorante, zafio y negrero) contrataría a un hechicero que tirando unos huesos me diera una predicción sobre alguien. La cosa quedaría más exótica y teatral, pasaríamos un buen rato y la fiabilidad sería la misma. La carta astral, las pruebas caligráficas y otras tonterías darían igual resultado.
El mundo moderno puede llegar a ser bastante hostil. Creemos que tenemos amigos pero no podemos contarles nuestros problemas. A pesar de todo hablamos, pero nadie nos escucha. Y si alguien nos ha escuchado olvidará todo lo que le hemos contado en un abrir y cerrar de ojos, no sin antes haberte reprochado algo. Nos explotan en el trabajo, no tenemos mucho tiempo libre y la hipoteca nos ahoga. Nuestra pareja no nos comprende y encima tenemos que dedicarle casi todo nuestro tiempo libre. En definitiva..... "somos carne de estos gurus de las ondas del diván"
*** Decir algo sabiendo lo que se está diciendo ***
¿Quién no ha conocido a la típica persona que opina de fútbol pero que en realidad no
sabe nada? ¿Cuántas veces nos hemos topado con gente que les da instrucciones al técnico y a los jugadores por televisión, radio y prensa? ¿Cuantos partidos hemos escuchado la frase célebre "hasta yo hubiera metido ese gol"?.
Pues bien, todas esas personas (en las que me incluyo) que no saben mucho de fútbol, pero que opinan como si lo sintieran en las venas, ¿no saben de fútbol? Los buenos comentaristas deportivos son como los buenos críticos literarios: gente que se ha especializado no simplemente en el ejercicio de un gusto o de una vocación, sino en las complejidades de una práctica y de su historia. La televisión está llena de programas donde se reconstruye la vida y milagros de un deportista, y de locutores que le ponen ánimo a la lectura innecesariamente comentada de un resultado, pero cualquiera distingue a los que saben porque han sido deportistas, o porque se han especializado con bastante trabajo, de los que simplemente tienen el oficio de entretener por un rato y soliviantar los sentimientos de la hinchada.
Hay una relación entre saber y hablar. El aprendizaje es el nexo entre decir algo y decir algo sabiendo lo que se está diciendo. En ese proceso hay momentos intuitivos, momentos intensamente personales sostenidos por el talento de cada uno y también momentos sólo dedicados a aprender aquello que se ignora. Aprender significa concentrarse en lo que ya se sabe para adquirir lo que todavía no se sabe. Cuando un comentarista dice "esa jugada es de libro", cuando un técnico de fútbol se refiere a la "jugada de pizarra" están aludiendo a esa cualidad intelectual del aprendizaje.
Alguien que no sabe muchas cosas de memoria opera sin sentido de la orientación, a tientas, chapuzando entre informaciones que no arman sistema. Imagínense un comentarista deportivo que tuviera que consultar en algún librito cuántos tipos de efectos puede llevar una pelota en movimiento: sería una especie de caricatura. En esa situación quedan dos caminos: ¡enmudecer o dedicarse a enunciar generalidades a precios de rebaja!
De los jugadores recién fichados y que relacionamos ¿Cuál crees puede ofrecer un mejor rendimiento para el Rácing Club Ferrol en la temporada 2007-2008?